La casa es hermosa. Super cómoda y cálida, tiene todo para que uno disfrute de su estadía allí . La ubicación es buenísima, a metros de una playa preciosa,cercana a comercios y restaurantes, y en un lugar muy tranquilo.
Renata,la propietaria, es un encanto de persona , atenta a todo lo que puedas necesitar . Nos esperó con una canasta de frutas,agua fresca y una bolsa de hielo. Espectacular.
Es genial llegar y que esté todo impecable y listo para dejar tus cosas y empezar a disfrutar. Sin lugar a dudas volveremos .