Este verano hemos estado dos familias durante una semana en la casa. La casa es muy grande y está muy bien equipada. La cocina en especial está muy bien y tiene todo tipo de utensilios. La terraza tienen unas vistas espectaculares y se estaba muy agradable. Las habitaciones estaban muy bien y las camas eran especialmente cómodas. Tienen conejos, una yegua y gallinas (a los niños les ha encantado estar rodeados de animales). Solamente hay un tres cosas en las que todos hemos coincidido: el acceso a la casa en coche es complicado ya que hay un camino de arena y piedras que se hace muy difícil si tu coche no es un 4x4. Aunque la casa no estaba muy sucia, por el precio que tiene la casa, si que deberían haberla limpiado un poco más antes de que lleguen los inquilinos. No todas las estancias que se anuncian de la casa estaban abiertas (aunque no las habríamos necesitado, pero si las anuncias, deberías ofrecerlas). El dueño de la casa es muy amable aunque se nota que cuando no tiene inquilinos, vive en la casa ya que hay cosas suyas por todos lados. No estamos acostumbrados a que en las casas rurales a las que vamos vivan los dueños o visiten la casa varias veces durante nuestra estancia. No es nada que me parezca grave, pero al no estar acostumbrados se nos ha hecho a todos un poco raro, aunque hay que decir que el trato del dueño de la casa ha sido buenísimo.