La ubicación, que es perfecta, así como el estado del apartamento, renovado y cómodo. También la reducción de ruido de la doble ventana, que hace que, aún desde el primer piso de una de las calles centrales de la parte vieja de la ciudad, se pueda dormir tranquilamente sin a pensar notar el ruido de los bares y tavernas.
Nada totalmente necesario. Pero podría estar bien añadir un par de tazas Mug para los desayunos, así como unos básicos de aceite y sal en la despensa, y un escurreplatos.